viernes, 10 de octubre de 2014

ASEV DESPIDE EL CURSO SOBRE LAS OLAS - 2ª parte

BODEGAS DOMINIO DE LA VEGA Y CLOVAMAR
CONTRIBUYEN  AL  ÉXITO  DE   ESTE    EVENTO

Domingo ludico-festivo para los/as socios/as de la Asociación de Sumilleres y Enófilos de Valencia, con un sol esplendido, clotxinas y cava de lo mejorcito de la región, gran afluencia y excelente armonía. Todo confluye para asegurar el disfrute de los sentidos, la alegría y el buen humor que caracteriza a este grupo de amantes de la gastronomía y los mejores vinos.

Fieles a la cita, nuestros amigos Daniel Expósito, enólogo de Dominio de la Vega, quién nos a aportado unos magníficos CAVA de su elaboración y Juan Aurelio Aragones, propietario de CLOVAMAR, SL y proveedor oficial de clotxinas de MARISQUERÍA CASA VICENT (Av/ Peris y Valero, 131 -Val- Tel: 963955114), quién además de llevarnos en su barca, nos ha cedido una de sus bateas ancladas en el Puerto de Valencia, para la celebración de esta CATA-MARIDAJE tan peculiar y 30 Kg de clotxinas recién extraídas de las cuerdas de su criadero, registrado en la DOP Clotxina de Valencia con el Nº 12.

Aprovecho para recordar que desde el año 2008, la Consellería de Agricultura otorgó a la clotxina valenciana el estatuto de Denominación de Origen Protegida. Esta DOP ampara a 22 cultivadores cuyas bateas están situadas en el puerto de Valencia y tienen una producción aproximada de 350 toneladas/temporada. Según certifica un estudio exhaustivo llevado a cabo por la Universidad Politécnica de Valencia, las clotxinas valencianas son ricas en vitaminas, calcio, hierro, potasio, fósforo, magnesio y Omega 3, certificando de este modo las cualidades de este molusco tan característico de las costas valencianas que, si bien es de tamaño más pequeño que el mejillón, sin duda es mucho más sabroso según los especialistas en gastronomía y sobre todos los consumidores.

Todo comenzó la vispera, del día "D", con la limpieza y adecuación del espacio a cargo de esta autora, que contó con la inestimable ayuda de Paco Guillem.
 

Por fin, todos/as dispuestos/as a pasar un gran día, una vez superado el ligero "disgusto" provocado por un "vigilante que quería ser comandante", llegamos sanos y salvos a bordo de la batea para dar buena cuenta de unas clotxinas magníficamente cocinadas por nuestro Vicepresidente, Abdon Mesado, propietario del BARRIOBAR MOSET I CANYA (C/Jose Andreu Alabarta, 41-Val- Tel: 963772079 - no te pierdas las patatas más que bravas de Doña Inés), que se pasó toda la mañana en la cocina improvisada de la batea, ayudado por Mapi Lléo, enóloga y esposa de Daniel Expósito, en calidad de "pinche" por un día.
La jornada transcurrió alegre entre brindis, risas y compañerismos, con el deseo de repetir la experiencia vivida. El regreso fue escalonado y algo mojado aunque sin incidentes, con un mar bastante más bravío que a nuestra llegada.

Autora: MLu Martin
Fotos: varios socios de ASEV









ASEV DESPIDE EL CURSO SOBRE LAS OLAS - 1ª parte

                 

¿CLOCHINA O MEJILLÓN?

¡Que pena! La palabra clochina no aparece en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, de mejillón dice molusco lamelibranquio marino y algo más que ya diré.

Si curioseas un poco “en la Web”, a lo que yo llamo escarbar, es interesante el debate que si clochina o mejillón, que si es o no es. Yo entiendo que son parientes próximos, de la misma familia (Mytilidae),  ella: Mytilus galloprovincialis, él: Mytilus edulis, ambos igual de comestibles, aunque cambie el epiteto.

Los lamelibranquios pueblan mares, ríos y lagos.
Son de la clase bivalvos y leer cosas de “estos bichos” es de lo más entretenido, es una organización diferente, primero es el cuerpo y un tegumento desarrolla la concha bivalva, un músculo aductor conforma el sistema de apertura y cierre de la concha. La charnela es un ligamento, se ve fácilmente un dispositivo de engranaje, como unos dientecitos para que las valvas cierren a la perfección.
Hay un manto que envuelve el cuerpo con muchas terminaciones tactiles, su programa informático. A veces tienen ojos, a veces muchos, tienen corazoncito pero las pobres no tienen cabeza diferenciada, ¡claro! que para lo que la gastan algunos.

Forman densas colonias, comunidades numerosas, colonizando grandes zonas de roca o fijas a un sustrato, seria el caso de los criaderos, de las bateas, donde la roca es una cuerda, una trenza de vida, a la que se unen “por pelillos”, esos hilos que son como sus brazos y se llaman biso. Se desplazan por una u otra razón rompiendo el biso.

Y ahora.....................hablemos de sexo, las ostras, muy picaras, tienen una sexualidad rítmica (ambisexuadas), vamos que se cambian de “chico-chica” cuando les parece oportuno, las clochinas son más serias, son unisexuadas, el macho de color más claro, amarillo y la hembra más anaranjada.
La fecundación tiene lugar en el mar, las hembras excretan una sustancia que al pasar al agua provocan la eyaculación en los machos próximos y el esperma también desencadena la puesta en las hembras, es cuestión de sincronizarse. Es como un Whatsapp, comunicación-relación, pero sin roce.
Son organismos filtradores, se alimentan de fitoplancton, materia orgánica en suspensión. Y también tienen depredadores, las Doradas, Llisas y otros se hacen “el longuis” y se dan un festin. El dueño de la batea esta siempre al tanto.

La clochina, es de menor tamaño que el mejillón, tonalidad más suave, jugosidad y sabor más intenso.
Parece que las aguas del Mediterráneo que acunan la vida de las clochinas, son más saladas y nutritivas que la de otros mares más abiertos, esto unido a los matices morfológicos diferenciadores  le confieren cualidades más sápidas.
 El mejillón se reproduce durante todo el año y la clochina los meses sin R (mayo-agosto), cultivo de temporada. 

La clochina de valencia es un producto originario de finales del s. XIX, se cultiva desde hace más de 100 años, con métodos tradicionales en 22 bateas (balsas flotantes), ubicadas en el puerto de Valencia y Sagunto. La autoridad portuaria de Valencia mantiene la concesión de un espacio en el puerto, donde se ubican las bateas, en agua cristalina, sometida a estrictos controles de calidad. 

 El cultivo requiere una minuciosa manipulación y mínimo procesado en el acondicionamiento de la cosecha.

Desde el 2007 cuenta con la marca de calidad CV para diferenciar un producto exclusivo, de patrimonio escaso.

Autora: Mª Angeles Novella